El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que las consultas del T-MEC solicitadas por Estados Unidos y Canadá están relacionadas con la operación de un megayacimiento de petróleo ubicado en el Golfo de México.
Se trata del megayacimiento Zama, en las aguas someras del Golfo de México, a 58 kilómetros de las costas de Tabasco y una superficie estimada de 26,7 kilómetros cuadrados.
Durante su conferencia matutina, el mandatario mexicano señaló que la disputa entre EEUU, Canadá y México en el marco del T-MEC se enfoca en la operación y explotación de este megayacimiento, el cual se encontraría cerca de otro yacimiento ya licitado y cuya operación corre a cargo tanto de Petróleos Mexicanos como de Talos.
Según López Obrador, el diferendo se da porque se acordó que los yacimientos que se encontraran cerca de otros ya licitados quedarían bajo el control de Pemex, ya que tiene mayor participación en la operación conjunta de los yacimientos.
“Los de Talos, que tienen menos, ya se hicieron los estudios, quieren operar el yacimiento conjunto, el que les fue concesionado a ellos como el de Pemex, y eso no es posible”, aseveró el titular del Poder Ejecutivo.
El presidente mexicano afirmó que esta diferencia con Talos, y otras dos empresas, “es por lo que se están dando estas consultas”, pero insistió en que no puede “entregar el patrimonio de nuestro país, tenemos que cuidarlo”.
“Para tener una idea, Pemex tiene 51% de todo el petróleo, Talos tiene como el 20 y otras dos empresas tienen 15 y 15; sin embargo, como es una empresa petrolera fuerte, que tienen mucha influencia, no entran en razón. Yo espero que se entienda de que legalmente le corresponde a Pemex la operación”, acusó López Obrador.
El mandatario mexicano advirtió que, de ceder la operación a Talos, podría suceder algo parecido a lo que ocurrió cuando se licitaron permisos para la explotación en favor de la española Repsol, sin que hubiera utilidad para México porque “todo era gasto”.
“Y cuando entregaron los contratos se argumentó de que Repsol iba a obtener más gas que el que extraía Pemex y eso no fue cierto, y se llevaron muchísimo dinero. Entonces, ya no queremos eso, no queremos que los negocios sean buenos para las empresas extranjeras y malos para la hacienda pública de México. Pero poco a poco se va entendiendo y vamos a llegar a los acuerdos”, concluyó López Obrador.